martes, 26 de agosto de 2014

Viaje Samarqand a Tashkent

Hola amigos,

Antes de nada, haré un comentario sobre el hotel “Orient Star Kuk-Serai”, en el que he estado alojado. Es un hotel grande, se supone que de 4*, con pretensiones y bien situado, pero con muchas deficiencias. Las habitaciones muy antiguas y con necesidad de renovación. En la mía, las luces no funcionaban y el grifo de agua fría de la bañera tampoco ("escaldaico he salido de ahí..."). El servicio también deja bastante que desear. Me han obligado a pagar la habitación en metálico y por adelantado. Y por último, el desayuno, escaso a todas luces. Todo esto, por 80$USD, que para este país es un precio muy elevado. Lo mejor: que está bien situado, muy cerca del centro histórico.

Para regresar a Tashkent, mi intención era coger el tren de alta velocidad "Afrosiab" o "Afrosiyob", a las 17:00h y así poder estar durante la mañana en Samarqand, pero no había billetes, por lo que he tenido que sacar pasaje para el tren "Shark", a las 12:03h. El importe del billete 32000 SUM, unos 12,80$USD, para salvar una distancia de 290 km

El tren-expreso “Shark” es el verdadero “Expreso Oriental” (“Shark” en uzbeco significa “Oriente”). Este tren conecta las tres ciudades antiguas de Uzbekistán: Tashkent, Samarqand y Bukhará.

Quiero describir la estación de Samarqand (N39.684812, E66.930190). Yo la etiquetaría de imperial, resultado de un sueño dictatorial de algún jerarca de la época soviética, enorme, decorada de acuerdo con la fecha del sueño, bien cuidada pero caduca, completamente tomada por los militares, que la consideran un punto estratégico, a la vista está.

Para acceder a ésta terminal ferroviaria: Control militar en el exterior. Nuevo control militar en las puertas de acceso, con registro minucioso de todo el equipaje, y finalmente, otro control militar en el acceso a los andenes.

Para que veáis lo asfixiante que resulta esto, os comentaré el control realizado para acceder a uno de los trenes, mientras esperaba el mío. El acceso al andén a través de un túnel. Dos funcionarios retiran el pasaporte a todos los viajeros. Un tercero, los escanea en una fotocopiadora acondicionada al efecto y los va amontonando, a la espera de que los militares revisen sus equipajes. Hecho esto, más funcionarios, acomodados en tres mesas de a dos, toman declaración por escrito a cada viajero. Esta totalmente prohibido hacer fotografías, pero me he arriesgado y he sacado alguna con el móvil, aunque han estado a punto de pillarme... Hay que arriesgar un poco ¿No os parece?



No puedes ir a ningún sitio, incluso al baño, sin estar vigilado. La estación está totalmente controlada. Llega el tren "Afrosiyob" y casi había en el andén, más militares que viajeros.

Mi acceso al tren ha tenido anécdota con resultado positivo. Que digo!  Excelente...  Os la contaré:

El tren "Shark" es muy largo, el billete exclusivamente en ruso y todo lo demás también rotulado en ese idioma, por lo qué, he tenido que ir preguntando en el exterior a diferentes  funcionarios cual es mi vagón, presentándoles para ello el billete. Por fin doy con el vagón. Ya solo me queda el asiento... Ya en el interior del vagón -de Segunda-, lleno de gente, en filas de a dos, derecha e izquierda, no consigo saber cual es mi asiento de ninguna forma, por lo que me bajo del tren y me dirijo al funcionario que me parece más "salao" de los que allí había. Volvemos juntos al vagón, y por el camino me dice algo en ruso que no entiendo, pero lo que sí he entendido es la palabra inglesa "sleep". Yo soy mucho de hacer "sleeping"... :-) Me estaba ofreciendo la posibilidad de ir en clase VIP, para viajar durmiendo, en un  compartimento para dos personas. Uhmmm...! Decido entrar al trapo. How much? Respuesta: Three dollars. Es evidente que sabe que hay compartimentos vacíos y el dinero es para él. Decido darle 5 dólares, en lugar de tres. Al momento estoy acomodado en un compartimento, y cinco minutos más tarde tengo un café sobre la mesita que hay frente a mí.



Me siento como un niño con un juguete nuevo, viajando lentamente, sin agobios ni atascos de tráfico, sin ruido, mirando el paisaje por la ventana, aunque debo decir que éste no ofrece alegría alguna. Prácticamente todo es plano, árido, con alguna casa o pueblo, aquí y allá, pero sin interés de ningún tipo, monótono..., pero una gozada viajar de este modo.

Una vez en la estación de Tashkent (N41.292206, E69.287636), ya sobre las 15:30h, he decidido ir a comer a Chorsu Bazaar, el mercado más importante de esta ciudad. Para ello, he tomado el Metro en la terminal de Tashkent, justo donde se encuentra la estación de tren. Ya le tengo cogido el punto al suburbano, a pesar de estar todo en ruso.



En unos minutos estaba en la otra punta de la ciudad, en el famoso mercado de Chorsu. Antes de salir a la superficie, ya olía a carnes asadas en parrilla. He elegido un restaurante, junto a la escalera que da acceso a la gran cúpula del mercado. Magnífica carne, ensalada y pan (como siempre, amasado a mano). Después he recorrido el mercado. Es una pasada el trajín que hay en este lugar. Para quien venga a Tashkent es indispensable una visita pausada a este mercado.

Al caer la tarde, de nuevo al Metro para trasladarme a la Estación más cercana al lugar donde se encuentra mi hotel.

Bueeno, mañana aún dispongo de unas breves horas en esta ciudad, antes de regresar  a mi casa. Pensaré como emplearlas...

Bihar arte

Un abrazo

1 comentario:

  1. Enhorabuena por lo conseguido y por tu valor Jon

    Solo una persona con un corazón enorme como el que tu tienes es capaz de hacer las cosas que tu haces, de viajar como tu lo haces y de sentir las cosas como tu las sientes.

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